Denuncias de la comunidad fueron la señal de alerta para que la Policía Nacional y el Invima se acercaran a la vereda San Onofre, en Cómbita, donde funcionaba una planta de sacrificio de aves que no cumplía con las normas sanitarias.

Por segunda vez el Invima procedió a realizar acto administrativo en este lugar, que ya había sido visitado anteriormente.
El comandante de la estación cómbita realizó el comparendo correspondiente, que incluye la suspensión temporal de la actividad y una multa tipo 4, que según según el Código Nacional de Policía, son 32 salarios mínimos legales vigentes (smlv).