La Mazamorra Dulce; una de las delicias de Boyacá

Por: Belén Osorio

#Boyacensiando

La primera vez que me ofrecieron Sopita de Dulce, o Mazamorra Dulce, pregunté que de qué estaba hecha, y la respuesta fue sencilla: Panela, harina, alguna fruta cítrica y guarapo. ¿Guarapo? Pregunté extrañada y enseguida me dijeron “¡Pruébela, le va a gustar!”

Con algo de desconfianza la probé y me encantó. Esa mezcla de calor, el sabor de la panela con el de la fruta, la textura cremosa, el sabor agridulce y el toquecito de fermento, fue perfecta para quitarme en par minutos el frío que tenía.

No sólo el tema del aporte calórico es uno de los beneficios de este plato típico boyacense. El alimento de la panela, la fruta, la harina y el queso, complementan ese coctel de vitaminas en el que las abuelas y madres confían.

En Tunja, a media cuadra de la Plaza de Bolívar, encontramos el Salón de Onces Típico “Amasijos del Valle de Tenza”, donde uno a uno los tunjanos y visitantes llegan a pedir el plato estrella de la casa: La Mazamorra Dulce.

Ambientado con música de la región, artesanías, amasijos y mobiliario típico, este es el lugar perfecto para sentir a Boyacá en lo más profundo del ser, y del paladar.